A lo largo de nuestro paso por las distintas etapas educativas, hemos conocido una cantidad inmensa de docentes que han contribuido a nuestra enseñanza y nuestro desarrollo.
Según García, López, Lorente y Sandoval (2020), el tutor en el ámbito de la educación primaria tiene un papel muy importante, pues su labor tiene una doble vertiente.
Por un lado, tienen las responsabilidades propias de cualquier docente, pero también son responsables del desarrollo personal y social de los alumnos. Son variadas las funciones y habilidades que debe tener un tutor, sin embargo, empecemos por el principio.
El tutor/a es aquel docente que se encarga de cada uno de los niveles educativos del centro escolar, están designados directamente por el director y son coordinados por el jefe de estudios. La función de estos tutores en el aula es la misma que tiene cualquier otro docente, y al mismo tiempo son un medio de conexión entre los diferentes elementos del centro, a saber; el equipo directivo, los alumnos y las familias.
Por otro lado, las funciones del tutor en el aula son muy variadas, un resumen aproximado de ellas sería el siguiente:
Orientar a los alumnos en el proceso de aprendizaje mediante el análisis de sus actitudes y sus necesidades para brindarles este apoyo.
Atender a las dificultades que puedan presentar los alumnos y ofrecerles soluciones optimas y viables.
Mantener el contacto con las familias, los otros docentes y el resto de los alumnos, siendo capaz de explicar la evolución de curso y el aprendizaje.
Evaluar de forma activa durante los consejos de evaluación.
Mantener el orden en el aula y hacer que este se mantenga a lo largo del tiempo.
Favorecer el desarrollo individual de los alumnos.
Promover el espíritu emprendedor y la participación.
Fomentar la investigación y el debate.
Desarrollar valores sociales positivos en los alumnos.
Analizando estas funciones del tutor podemos extraer algunas habilidades que serán fundamentales como tutor. Los tutores deberán ser equilibrados, maduros y comprensivos, deberán además tener una buena capacidad de escucha y comprensión. Se hace presente en este punto la empatía, la motivación y la profesionalidad. El tutor debe ser una persona coherente con sus acciones y con capacidad de liderazgo para dirigir la clase y hacer de esta un verdadero espacio de aprendizaje, reunión y crecimiento personal.
Así pues, el plan de acción tutorial puede seguir distintas líneas de acción a la hora de llevarse a acabo. Para elaborar un plan de acción ideal en un centro se suele seguir las siguientes fases:
Fase de sensibilización: durante esta fase, el cuerpo docente tendrá la misión de encontrar y reconocer las distintas necesidades o dificultades encontradas en el centro para poner en marcha un plan de acción tutorial que trabaje sobre estas.
Fase de planificación: se trata de, una vez reunida la información sobre las necesidades del centro, como su nombre indica, la planificación y elaboración del plan de acción tutorial en sí mismo, es decir, consiste en la toma de decisiones sobre las distintas líneas de actuación de este.
Fase de programación: tras tener planeadas las líneas de actuación, es el turno de decidir y ajustar el plan de acción tutorial a la actividad docente del centro y decidir como y cuando se llevará a cabo.
Fase de realización: durante esta fase, como su nombre indica, se llevará a cabo el desarrollo propiamente dicho del proyecto. Es decir, esta es la fase en la que el proyecto toma vida y es llevado a cabo en el centro.
Fase de evaluación: una vez realizado el proyecto, como es lógico, toca evaluarlo. Durante esta fase se comprobará que el proyecto a cumplido los objetivos propuestos durante la fase de programación y se revisará si todo funcionó como se estipulo durante la fase de programación.
En conclusión, el tutor, haciendo uso de sus conocimientos en psicología, pedagogía y sociología, así como de su dialéctica tiene la oportunidad y las habilidades necesarias para generar en el centro un entorno seguro y afable para la participación, el desarrollo y el crecimiento personal, ayudando así a crear personas integras y valiosas para la sociedad con la que se encontraran al salir de las aulas.
Bibliografía:
García, A., López, C., Lorente, V. y Sandoval, J. (2020). El Tutor en la Educación Primaria. Universidad de Castilla-La Mancha. Recuperado de:
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